domingo, 20 de junio de 2010

Aeropuerto de Las Palmas y llegada a Nouakchott

Volamos de Madrid a Las Palmas. El suelo de los aeropuertos es ideal para jugar a la peonza y en Canarias nos miraban sorprendidos. Los mexicanos campeones del mundo no habían llegado hasta allí para venderlas.¡Qué bien se come en el restaurante del aeropuerto!
En el vuelo a Nouakchott ya no había restricciones de peso y en la fila se veían grandes cajas de cartón. Llegar a Mauritania, pasar el control de pasaportes y encontrarnos con Guide, mi cuñado y padre de Siju, fue sentir que volvíamos a casa. ¡Y que esta vez no ibamos a dar dinero de más a los que nos llevaron las maletas!
Organizarnos en los coches que nos venían a buscar fue complicado. Las maletas salían del capó, aunque el policía que paró uno de los coches no llegó a multarnos, tan solo cogió algún billete doblado..
El barrio nos esperaba con sus luces, sus ruidos...